La fruta es un elemento fundamental en el crecimiento de un niño, para tener una correcta salud nutricional y prevenir muchas enfermedades. Es importante potenciar el consumo de fruta tanto nuestros pequeños como los adultos.
Hay un sinfín de beneficios, entre los cuales destacan:
Gran contenido de agua, por lo tanto nos proporciona hidratación.
Contiene gran cantidad de vitaminas como la vitamina A y C.
Contiene minerales como fósforo, potasio, hierro y muchos más.
Favorece la digestión.
Ayuda con la retención de líquidos.
Controla el colesterol.
Optimiza el metabolismo.
A veces los niños rechazan la fruta, aún así hay que intentar incorporarla en su dieta diaria. Expertos recomiendan un consumo de 5 veces al día.
Te dejamos una serie de consejos que puedes seguir:
Si quieres incentivar su consumo, empieza haciéndolo tú. Los niños se fijan constantemente en su entorno.
Desde los 4-6 meses, puedes empezar a dársela en trocitos o deshidratada.
Ofrécesela a lo largo del día. Es preferible la fruta entera que un zumo.
La fruta debe estar a su alcance, procura tener variedad y en un lugar visible para que la puedan coger ellos mismos.
Presenta la fruta de forma divertida, de distintas formas, usa pajitas de colores, brochetas con sus frutas favoritas, y hazle partícipe de preparar el plato.
Haz batidos.
Añade fruta a la repostería.
Intenta que sea de temporada, para que esta tenga buen sabor y esté fresca.
Sed pacientes, aunque no quieran comérsela, puedes incluirla en la dieta sin que se den cuenta.
¡Ánimo!
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